¿Qué tal? He pensado que había hablado muy poco de libros (a ver, tampoco es que lleve muchas entradas jajaja) y quería recomendaros dos libros (en dos posts) que medio marcaron mi "adolescencia" por así decirlo, cambiaron mi forma de verla y me ayudaron a crecer como persona: "Rebeldes" y "Mi planta de naranja-lima".
Rebeldes de Susan E. Hinton es una novela muy simpática y sencilla que trata de dos bandas de adolescentes neoyorkinos, los greasers y los socs, pobres y ricos, el protagonista y su amigo, después de una pelea, se ven involucrados en un incidente y sin ser culpables tienen que huir.
Es curioso y a tener en cuenta que después del 50 aniversario de su publicación, justo este año, el mensaje siga vigente. Una novela que abarca el problema social que todavía está presente. Problemas familiares, marginación y ausencia de futuro hace que jóvenes que se sienten excluidos de su "ambiente", familia, amistades, etc., busquen en un grupo urbano lo que no encuentran en casa. Aunque siempre tengan la esperanza de llegar a ser alguien.
La novela está adaptada al cine por Francis Ford Coppola (considerada ya un clásico de este, muestra la cruda realidad en la que se mueven algunos adolescentes en los barrios marginales de las grandes ciudades).
Sinceramente éste libro me hizo sentir nose, tonta a lo mejor, lloras, porque siempre se llora, pero junto con la novela de la otra entrada te cambia un poco la manera de ver las cosas, como que te espabila, siempre viene bien un jarro de agua fría. Si me hacéis caso y os la leéis os parecerá un poco rara o infantil, es para leerla en la adolescencia, pero Mi planta de naranja-lima, no hay edad para ignorarla.
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